CES de Las Vegas.Mercedes Benz y Audi presentaron sus prototipos que no necesitan conductor. Los asientos giran y tienen pantallas laterales.
El desafío de las automotrices es anticiparse a las fantasías de los tripulantes. En las líneas de alta gama, la apuesta inmediata es lograr vehículos autónomos donde el conductor, en lugar de viajar con sus manos aferradas al volante, lo haga pulsando alguna de las pantallas táctiles que lo rodean.
Buscando adelantarse a su época, Mercedes Benz presentó ayer en el CES de Las Vegas el F 015, un prototipo funcional rodeado de paneles LED. El chiste en este caso es que cuando están de color azul, indica que la nave se conduce sola y si están de color blanco, hay una persona a los mandos. Otro de los detalles superiores es que los asientos rotan para que los ocupantes puedan conversar cara a cara mientras van por la ruta.
“Quien se concentra en la tecnología no comprendió aún cómo la conducción autónoma cambiará nuestra sociedad. El vehículo irá más allá de su papel de simple medio de transporte y se convertirá a fin de cuentas en un espacio de vida móvil”, predijo Dieter Zetsche, presidente de Daimler.
Y si acomodar el auto en un espacio reducido era una complicación, BMW presentó en la feria de consumo electrónico un reloj inteligente que, entre otras funciones, consigue maniobrar el auto en forma automática. El conductor simplemente suelta el volante, activa el asistente de estacionamiento y los sensores se ocupan del resto.
Para pilotos impacientes, el Audi A7 Sportback Piloted tiene la capacidad de acelerar, frenar en forma automática y realizar maniobras de cambio de carril y sobrepasar a otros vehículos. El secreto de su destreza está en el radar de largo alcance del control de crucero adaptativo (ACC), que se combina con otros radares, un escáner láser y cámaras 3D para posibilitar un control de la parte delantera y trasera y completar la visión de 360° necesarios para la conducción.
Y si el desafío es innovar, el Volkswagen Golf R Touch reemplazó su consola central por una pantalla de 12.8” y otra inferior de 8” que, mediante una cámara, reconoce los movimientos efectuados por la mano y los interpreta con una gran velocidad de procesamiento.
(Fuente: Marcelo Bellucci – Diario Clarín)
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